**El asesinato es la manera más violenta de vulnerar el derecho a la libertad de expresión: Párroco
Ixtaczoquitlán, Ver.- Con una eucaristía de cuerpo presente en la Capilla de la Inmaculada Concepción, familiares, amigos del pueblo de Potrerillo y compañeros de los diferentes medios de comunicación, dieron su último adiós al reportero y locutor Jacinto Romero Flores.
En punto de las 11 de la mañana dio inicio la misa en honor al amigo de todos y al siempre altruista Jacinto Romero, presidida por el sacerdote Alfredo Mazahua.
El párroco pidió a Dios que ilumine y sostenga a su esposa Mariana, a su hija Mariana y a sus hijos Uziel y Germán, y demás familiares, como amigos, para que puedan ser fuertes y poder salir adelante con esta pérdida.
“Nuestro hermano Jacinto fue víctima de esta violencia que vive el país, debemos de descubrir que el asesinato es la manera más violenta de vulnerar el derecho a la libertad de expresión, hoy se ve mutilada y cuartada esa comunicación que daba nuestro hermano Jacinto Romero”.
Dijo que este artero asesinato no únicamente priva de la vida a Jacinto Romero, sino afecta a terceros y la familia queda desamparadas, bajo la sospecha y amenaza del actuar de quién lo agredió y la sociedad queda privada de esa comunicación.
“Hace como un mes estuve con él (Jacinto) platicando porque su hija termino un curso y entonces hablando le preguntaba si no tenía miedo por la función que él ejercía y él me contestó: “padre en esta sociedad hoy no hay respeto por la persona se han perdido nuestros valores” y es verdad, es pues que nosotros tenemos que fomentar y trabajar sobre el valor de la persona”.
Así mismo pidió a Dios que reciba en sus brazos a Jacinto y le conceda la gracia y la vida eterna., “Que nos conceda ser solidarios y que este acontecimiento nos ayude para estar libres en esa fe en lo que creemos, en lo que luchamos y en lo que queremos para nuestra sociedad, así se lo vamos a pedir al Señor”.
Tras culminar la eucaristía el ataud que contenía el cuerpo de Jacinto o “Jazmín” como muchos lo conocían, fue despedido entre lágrimas y abrazado por su familia y sus compañeros de trabajo.
El ataud de color madera con el estampado de la Virgen de Guadalupe, de quien Jacinto era muy devoto, fue cargado por sus hijos y hermanos e ingresado a una carroza en color blanco, misma que lo llevó a su casa, en donde su esposa Mariana y sus tres hijos: Uziel, Mariana y Germán le dieron su último adiós.
Posteriormente el feretro partió en marcha lenta cruzando las Unidades de Potrerillo, hasta llegar al lugar en donde fue privado de la vida, lugar en donde su familia exigió al Gobierno Federal y Estatal haya justicia.
Minutos después el cortejo fúnebre continuó su camino pasando por la Localidad de Potrerillo Pueblo, en dl de decenas de personas le lanzaron confeti y rosas de color blanco, continuando por la Calzada Morelos, hasta llegar al Boulevard Fernando Gutiérrez Barrios, ingresar por la Avenida Ruiz Galindo hasta llegar al Cementerio Municipal.
Una vez que el cortejo fúnebre ingresó al panteón, familiares y amigos cargaron el ataúd hasta el sepulcro donde descansarán los restos de Jacinto Romero Flores y le dieron cristiana sepultura.
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