Un perro callejero de color negro encontró en una terminal de autobuses en Acapulco, Guerrero, una oportunidad laboral.
Firulais, mejor conocido como ‘Negro‘, llegó a la Central de Autobuses ubicada sobre la Avenida Ejido hace año y medio.
Poco a poco se ganó el cariño de empleados y transportistas, quienes lo adoptaron como un miembro más de la terminal.
Recientemente el perro recibió un gafete que lo acredita como “aplana calles” y “supervisor de ruta“.
‘Negro‘ recibe agua y comida a diario y suele vigilar la subida de pasajeros a los autobuses al igual que su partida.
La historia del perro callejero se viralizó en las últimas semanas en redes sociales.
Usuarios han aplaudido el actuar de los transportistas.
Con información de López-Dóriga Digital