Córdoba, Ver.- Para dar certeza a los cordobeses sobre el estado toxicológico que guarda el inmueble de Anaversa, el Ayuntamiento de Córdoba solicitó que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), inicie un nuevo estudio de caracterización para determinar el grado de contaminación que puede persistir en este espacio, a 25 años del incendio de la factoría de agroquímicos.
En una primera visita por parte de la Profepa al predio, junto con autoridades municipales y José Jorge Llosa Sánchez, representante legal de Luis Javier Quijano Garmendia, dueño del inmueble, se realizó una revisión interna y externa, tomando con un geoposicionador satelital las medidas del terreno y muros para determinar la cantidad de muestras a levantar de acuerdo a la normatividad vigente en México.
María de los Ángeles Morales Oyarzabal, coordinadora de Ecología y Medio Ambiente, señaló que el Gobierno municipal tiene la confianza que este nuevo estudio permita a las autoridades federales, del medio ambiente y municipales encaminar una solución a este pasivo ambiental, pues a 25 años de la tragedia de Anaversa, es tiempo de empezar a curar la herida.
Refirió que esta visita por parte de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) es a petición del Ayuntamiento de Córdoba y del presidente Tomás Ríos Bernal por dar a los cordobeses certeza sobre el predio de Anaversa, y en caso de representar un peligro por la presencia de agentes contaminantes, se establece el procedimiento de saneamiento por parte del dueño.
Explicó que este miércoles se delimitó el terreno según lo marca la Guía de Evaluación de Riesgos Ambientales (ERA), en una segunda visita será a través de un laboratorio acreditado ante la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA) y Profepa, la que dará continuidad al proceso de análisis del material y estado que guarda el inmueble.
“Para nosotros y los cordobeses es una garantía saber que la empresa asignada para realizar los estudios está acreditado por estas instituciones, que cuenta con un laboratorio bien calibrado, con buenos métodos, es seria y profesional para aplicar la metodología adecuada para este tipo de pasivos ambientales”, expresó la funcionaria.
Este proceso, dijo, tiene dos etapas: la primera determinará si el inmueble presenta contaminación por sustancias peligrosas y en qué partes del terreno y muros; la segunda, permitirá trabajar sobre volúmenes precisos que deberán sanearse.
En tanto Juan Salvador Quintero, de la Oficina Central de la Dirección General de Inspección de Fuentes de Contaminación de la Profepa, señaló que este miércoles se entregó a los representantes legales del predio donde funcionó Anaversa y al Ayuntamiento de Córdoba, acta de inspección donde se asienta la revisión ocular y la documentación sobre lo observado en esta primera visita.
E indicó que esta documentación será evaluada y analizada para observar si hay alguna omisión o irregularidad de parte de los dueños y de haberla, se les emplazará a asumir medidas correctivas, debiendo presentar en un plazo de 15 días presentar las pruebas que a derecho corresponda, dando seguimiento hasta que se emita la resolución correspondiente.
En esta diligencia de la Profepa en el terreno que ocupó Anaversa, participaron la regidora comisionada de Ecología y Medio Ambiente, Guillermina Fernández Fernández; el jefe de Asentamientos Humanos de la Dirección de Obras Públicas del Ayuntamiento de Córdoba, Héctor Saúl Castilla Moyado; los titulares del Ecología y Jurídico, María de los Ángeles Morales Oyarzabal y Jesús Iván Díaz Martínez, respectivamente; Juan Salvador Quintero, de la Oficina Central de la Dirección General de Inspección de Fuentes de Contaminación de la Profepa, y José Jorge Llosa Sánchez, representante legal de Luis Javier Quijano Garmendia, dueño del predio.