Córdoba, Ver.- Este viernes 25 menores y dos mujeres adultas, una de ellas de 61 años de edad, concluyeron el curso de natación que se impartió durante tres meses en la Alameda Rafael Murillo Vidal, como parte de los 36 talleres del DIF Municipal y más de 500 alumnos que están cerrando ciclo en este mes. Será en agosto próximo cuando reinicien las actividades de capacitación para el trabajo y activación física del DIF.
Ana María Zepahua Lazos, directora del DIF de Córdoba, felicitó a los alumnos de la maestra Concepción Luna Sandoval, luego de presenciar la demostración de lo aprendido: los avanzados nadaron estilo crol y pecho, mientras que el resto mostró sus habilidades en los estilos bucito, flecha, perrito y nado hacia atrás.
Padres de familia, abuelos y demás acompañantes animaron en todo momento a los niños durante su última práctica, siendo cuatro años la edad los más pequeños que mostraron en la alberca su gusto por esta disciplina.
Giselle Vilchis Castro, de 7 años de edad, fue una de las niñas que concluyeron el curso, mostrándose muy contenta por su logro y por haber conocido a nuevos amigos, “aprendí a nadar de crol, de bucito y flecha, me divertí mucho”. Luis Jared Álvarez Sánchez, de 6 años, también disfrutó el aprendizaje, “espero volver a entrar a las clases”.
Los beneficios de la natación van desde el aumento de la resistencia cardiorrespiratoria hasta la rebaja de la frecuencia cardiaca y la consecuente estimulación de la circulación sanguínea. El crol es el estilo que más ayuda a aumentar nuestra capacidad pulmonar, ya que al exigirnos una mayor deuda de oxígeno se incrementa la producción de glóbulos rojos en nuestro organismo, lo que favorece la circulación del oxígeno en nuestra sangre y limpia nuestros pulmones.
Por otro lado, practicar por lo menos 20 minutos de natación al día también ayuda a mejorar el estado de ánimo, ya que contribuye a reducir el estrés. Asimismo, nadar exige que nuestro cuerpo utilice más de dos tercios de los músculos que tiene el cuerpo humano, así que los tonifica, los fortalece e, incluso, ayuda a prevenir las lesiones de las articulaciones que se producen con la edad.
Con la natación los niños aprenden de forma natural a adoptar una postura corporal correcta, además contribuye al desarrollo psicomotor, por lo que también es un deporte especialmente indicado para personas mayores o que padecen algún tipo de enfermedad degenerativa de las vías motoras.