Orizaba, Ver.- Una mujer vendedora ambulante lleva más de 6 meses sin el servicio de electricidad debido a que trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad le detectaron una supuesta anomalía en su medidor, además de que le fue impuesta una multa de 150 mil pesos.
Debido a éste atropelló y abuso, una veintena de comerciantes orizabeños agremiados al Frente de Acción Revolucionaria llevaron a cabo una protesta pacífica en las afueras de la CFE asentadas sobre la Calle Madero, del primer cuadro de la Pluviosilla, con el objeto de que está mujer sea atendida por los directivos pues lleva más de 180 días sin el servicio de electricidad de manera inhumana.
“La compañera se llama Estefanía, llegó gente personal de Comisión Federal de Electricidad a su domicilio, revisaron su medidor y según ellos encontraron una anomalía que la hace merecedora de pagar una multa de 150 mil pesos, dinero que no tiene es una cantidad exagerada”, informó el dirigente de la agrupación Gaudencio Brito.
Señaló que están enterados que el mismo personal de la Comisión Federal de Electricidad, llega a los diferentes domicilios abre los medidores y los altera, posteriormente llegan otro grupo de trabajadores y detectan anomalías para interponer multas exageradas como esta registrada en Lomas de San Sergio, municipio de Mariano Escobedo.
“Son más de 150 mil pesos, que sumados hacen una millonada de dinero que nos preguntamos en los bolsillos de que funcionarios fueron a quedar, es mucho dinero”.
Reiteró que está joven comerciante lleva 6 meses sin el servicio de electricidad, además de que vive en un cuarto piso, en donde se requiere del funcionamiento de una bomba para abastecer su tinaco de agua potable.
“Llegamos a éste extremo, además de que es un derecho constitucional, porque la compañera durante todo este tiempo ha dado de vueltas y no le han solucionado nada. La mandaron con un funcionario la enviaron con otro y nunca le han dado una solución. La compañera pedía hablar con el jefe de esta oficina que es el licenciado “Smith” pero nunca están, hasta la fecha no la ha atendido, y por boca propia de los mismos trabajadores le dijeron que esta persona jamás la iba a atender porque nunca está. Nos hartaron la paciencia y la compañera decidió sumarse con nosotros y llevar a cabo éste día está protesta”.
Los inconformes dijeron que no se retirarán hasta que exista una verdadera justicia pues la compañera comerciante atraviesa por una situación muy grave además de que su solvencia económica no es favorable.
“El promedio que gana un trabajador en la región de Orizaba es de mil 500 pesos semanales, imagínense cuántas semanas debería trabajar para poder pagar los 150 mil pesos que le están exigiendo, y luego qué va a comer qué va a vestir, cómo va a sacar adelante a sus hijos, es algo exagerado. Es una situación grave mientras los funcionarios están a dos nalgas sentados atrás de un escritorio dando órdenes y chingándose el dinero de los trabajadores”.
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