Pese a que los uniformados quedaron de apoyar a la familia en los gastos médicos, hoy se hacen los desentendidos; los perjudicados lo único que buscan es que los policías se hagan responsables de sus actos.
Fue el lunes 6 de junio que Don Juan Carlos recogió a su nieta Vidisari en una escuela secundaria de la colonia Fuentes Del Valle en el municipio de Tultitlán Estado de México, cuando a dos cuadras de su domicilio fueron embestidos en su moto taxi por una patrulla de la seguridad municipal.
Tras los hechos, abuelo y nieta fueron trasladados al hospital de lomas verdes, mientras que los policías involucrados quedaron de hacerse responsables por todo, ya que se trataba de un accidente cuando presuntamente los uniformados iban en persecución de unos delincuentes.
Vidisari de 13 años resultó con una fractura de fémur mientras Juan Carlos únicamente tuvo golpes leves, pero desde ese día no han vuelto a saber de la policía y mucho menos de algún apoyo.
No permiten levantar la denuncia
La Señora Berenice, madre de la menor, acudió con los mandos de la policía municipal quienes le dijeron que para poder usar el seguro de la patrulla se necesitaba una denuncia ante el Ministerio Público (MP), por lo que la madre de la menor acudió al MP de Tultitlán dónde le dijeron que el caso estaba siendo indagado en Cuautitlán Izcalli. Al acudir a ese municipio contiguo no se le permitió levantar la denuncia ya que una carpeta de investigación había sido abierta por ese mismo caso, al pedir información de la carpeta, está le fue negada.
Por esto ya han presentado denuncias ante asuntos internos de la Secretaría de Seguridad del Estado así como en la Fiscalía de Servidores Públicos; lo único que buscan es que los policías se hagan responsables de sus actos.
Información Milenio Noticias.