El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que las masacres de civiles continúan registrándose en el país, pero aseguró que ya no son cometidas por el Estado, “y eso es importante”, aseguró.
“Es un problema complejo, heredado, que se abandonó durante mucho tiempo y no se atendió el fondo de la inseguridad y la delincuencia”, sostuvo el mandatario.
“Estamos padeciendo los polvos de aquellos lodos, y es un proceso que lleva tiempo pero ya se están viendo los resultados”, agregó López Obrador durante su conferencia de prensa matutina del jueves en Palacio Nacional.
Agregó que, en sexenios pasados “se pensaba que todo se iba a resolver con medidas coercitivas de mano dura, y se asoció la delincuencia organizada con la autoridad”.
Durante la conferencia de prensa mañanera aseguró que su gobierno atiende las causas de la inseguridad y la violencia como disminuir la pobreza, aumentar el salario, incrementar el empleo y atender a los jóvenes, “pero eso lleva tiempo”, aseguró.