Alpatláhuac, Ver. Cómo todo un campeón fue recibido Miguel Camarillo, el ultramaratonista que murió en la frontera de Canadá con Estados Unidos y cuyos restos arribaron este domingo a Alpatláhuac.
Fue pasado el medio día que el feretro del joven originario de Ateopa llegó al entronque a Alpatláhuac, donde lo esperaba el cortejo fúnebre, integrado por corredores de este municipio y sus alrededores, así como familiares y amigos.
Fue a finales del mes de mayo que se perdió comunicación con Miguel, por lo que sus familiares boletinaron su fotografía a través de las redes sociales con la esperanza de localizarlo.
Casi 20 días después, se confirmó el lamentable deceso del corredor que en más de una ocasión puso en alto el nombre de Alpatláhuac no sólo a nivel regional, sino estatal.
Tuvo que pasar casi otro mes para que finalmente las cenizas del joven atleta pudieran volver a su lugar de origen, donde fue recibido y despedido como lo que fue, un campeón.