El presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que hace falta imaginación al gobierno estatal para resolver el problema del agua en Nuevo León, y propuso otorgar estímulos fiscales a los empresarios que bajen su producción y consumo del líquido para priorizar a la población.
Desde Palacio Nacional, durante su conferencia mañanera, el mandatario federal descartó revisar o cancelar concesiones a las empresas que utilizan agua para su producción, como refresqueras o cerveceras, pues consideró que es una situación emergencia que podría terminar con las lluvias.
Reiteró que es un asunto de definir prioridades y de buscar acuerdos porque, explicó, los empresarios ayudan si se les hace el planteamiento.
