MILLONARIO DERROCHE DE ERICK LAGOS
Aunque si bien esta administración ha sido cuestionada desde los primeros meses, hay que decir que una vez que le ha tocado abrir plaza al secretario de Gobierno, Rogelio Franco Castán, al menos no tuvo empacho en brindar una comparecencia con “carnita” como se dice en el argot, con información que indigna incluso, por la forma en que su o antecesores llevaron la dependencia para someter a grupos y organizaciones sociales.
Y es que el perredista al presentarse como parte de la Glosa del Primer Informe en el Congreso del Estado dejó claro que quienes llevaban la política interna, hoy diputado federal, Erick Lagos, durante cuatro años; y luego Gerardo Buganza por medio año más.
Y es que si también Flavino Ríos estuvo más de un año al frente, las prácticas coercitivas y de corrupción por sus antecedentes no pueden más que atribuirse al afamado Lagos Hernández.
Cerró la dependencia en mes y medio Genaro Mejía quien fue nombrado por Flavino Ríos como titular de la misma cuando Flavino asumió lo que quedaba de la gubernatura. Lo que es relevante es que Franco haya revelado que se encontraron contratos donde se pagaban millonarias sumas para dicho fin.
Según esto, uno de ellos era por 40 millones de pesos destinados a los 400 pueblos. También una cuenta bancaria donde se depositaban 237 millones de pesos, presuntamente para grupos sociales diversos, a fin de que no se manifestaran.
Rogelio Franco no pudo evadir sin embargo las preguntas sobre las acusaciones de represión a las protestas, por lo que enlistó que se tienen registrados 19 manifestaciones de ese tipo. Y que en siete se tuvieron que utilizar los grupos de la fuerza pública, para liberar las vías de comunicación.
Los diputados hicieron lo suyo, y lo confrontaron sin duda, pues este gobierno cuestionado por ese motivo, lo que seguramente orilló a Franco a detallar: “Hay algunos que su negocio era el bloqueo de calles, hay un convenio que tenía la Secretaría de Gobierno con 400 Pueblos, donde entregaba recursos por 40 millones de pesos, recurso que no se destinaba a educación, no tenemos un solo acto de represión con la organización ahora”.
Ahora “no se paga a personas para evitar que se manifiesten”. De algo Franco se puede quejar es que no existió un aplausómetro o cargada de los asistentes y diputados, podría decirse que transcurrió sin elogios.
Pero las versiones entre los diputados se perfilaron en el sentido de que no se ha logrado dar certidumbre en la estabilidad social, y se enfocaron a los temas de los bloqueos. Como que para los legisladores era más importante eso que temas de urgencia para la entidad.
Eso derivó que el funcionario trasladara al pasado los conceptos de represión social y hostigamiento desde la dirección de la Política Regional.
No dejó de lado el tema del bloqueo que se mantenía en la caseta de cobro del puente Coatzacoalcos 1, y que al llegar al gobierno se logró desactivar, cuya toma duró más de 6 meses; al dialogar con los manifestantes en la zona sur del estado.
Otro caso que abordó ante los legisladores fue el de Papantla, donde pobladores indígenas pedían caminos, allí Franco no desaprovechó para echarse flores en el sentido de que este año en la Cumbre Tajín “nadie bloqueó, y no se destinó ni un solo peso para evitarlo”, pero no dijo cuánto costaba eso al anterior gobierno.
LA BOLITA A LA FISCALIA
“Esperamos que la Fiscalía General de Estado haga su trabajo, y se castiguen desvíos de recursos para pagar que no se manifestaran”. Y lo más interesante fue cuando le prometió a los integrantes del Congreso un listado de grupos que recibían recursos “y beneficios y apoyos en efectivo, por eso hoy el quebranto financiero, por eso hoy se quejan, porque no reciben los beneficios que le quitaban al pueblo”.
Aunque no hubo cifras del burocratismo en la dependencia, Franco llevaba el tema preparado para hablar de un proceso de reestructuración para adecuar su organigrama. Y fue cuestionado sobre las áreas de nueva creación, pero afirmaría que es parte del nuevo reglamento interior.
Si bien Franco no se vio ávido de reflectores si aprovechó para el lucimiento. Pero también cierto que pocos funcionarios había brindado cifras y números, y que que por mucho se han escondido en los viejos formatos de presentarse ante la Legislatura. Habría que ver también si las acostumbradas operaciones donde se “planchaba” en el Congreso antes de las comparecencias en esta ocasión también fue una práctica desechada, y al menos pareciera que así ocurrió.
