La actriz Livia Brito de nueva cuenta está dando de qué habalar por culpa de su novio Mariano Martínez, con quien tiene una relación de cuatro años y a quien defiende a pesar de los escándalos, esta vez, el joven entrenador enfrenta cargos de presunto secuestro y robo por parte del diseñador de moda y asesor de imagen venezolano Enrique Hernández.
Mariano es el entrenador personal de Livia, se conocieron cuando una amiga se lo recomendó para entrenador persona; Brito contó en el programa Pinky Promise, en 2021, que a ella le atrajo desde el primer momento, y le gustó mucho que él no supiera que ella era actriz.
Livia detalló que prácticamente ella fue quien se le lanzó, pues a él le cuesta trabajo tirarle la onda a las mujeres, por lo que la coquetería fue muy poca.
En aquella charla expresó que se sentía “feliz, contenta, a gusto, muy relejada”.
Un amor entre escándalos
En 2020, la pareja protagonizó un episodio de violencia cuando el fotógrafo Ernesto Zepeda los captó en una playa de Cancún.
En aquella ocaisón, la actriz y Ernesto se molestaron cuando se dieron cuenta que Zepeda les estaba tomando fotos en un lugar público; el hecho que desató una discusión entre la actriz y el fotógrafo terminó en golpes hacia Zepeda e incluso él afirmó que la pareja le quitó su cámara y otros instrumentos de trabajo que llevaba consigo.
El fotógrafo demandó y luego ella contrademandó, argumentando que Ernesto Zepeda era responsable por invadir su privacidad.
“Estaba en la playa tomándole fotos en un espacio público y con mucha gente, no era propiedad privada y pues me violentó junto con su novio”, dijo Zepeda en su momento. Livia ofreció una disculpa en redes sociales, la cual dejó más dudas que certezas.
INFO DEL UNIVERSAL