Córdoba, Ver.- Un bebé de seis meses de gestación murió presuntamente dentro de las instalaciones del Sanatorio Huerta, luego de que personal médico y de guardias de esta institución le negaran la atención médica a su madre.

La joven, identificada como Samantha Díaz Sánchez y su esposo Juan Antonio Mendoza Hernández, denunciaron los hechos ante la Fiscalía General del Estado al señalar que adquirieron un paquete de maternidad pero que a pesar de ello los médicos dejaron que el bebé muriera sin atención médica.

“Compramos un paquete y llegué porque sentía unos pequeños dolores, la doctora me hizo un tacto, escuchamos los latidos del bebé e insistimos que era necesario que me internaran porque tenía punzadas fuertes”, contó la mamá.

La pareja salió del hospital y compró los medicamentos pero a las 22:00 horas hubo más complicaciones.

“Llamé a la doctora y me dijo que ya no podría atenderme, que estaba de salida.

Aún así salimos en taxi y llegamos al hospital, estaba lloviendo y nadie nos atendió, eran casi las 11 de la noche”.
El esposo relató que la doctora estaba literalmente escondida mientras, que su esposa pedía a gritos ayuda desde el interior del taxi.

“Mi esposa se metió como pudo al hospital y comenzó a gritar que sentía algo, fue cuando me acerqué con mi mamá y Samantha insistió en que el bebé estaba naciendo”.

Samantha se bajó el pans y sus familiares pudieron observar medio cuerpo del bebé afuera, literalmente el bebé quedó dentro de un tóper después de desprenderse del vientre de su madre.

“El bebé, ya muerto, quedó tapado con un pañalito muy a pesar de que mi mamá previamente gritaba que el bebé estaba respirando, aún con ello nadie la atendió.

A mi esposa le improvisaron en ginecología un tacto para extraerle la placenta, fue una especie de un legrado improvisado”.

Directivos del Sanatorio Huerta, encabezados por el doctor Rivadeneyra, se negaron a entregar el certificado de alumbramiento y defunción por lo que el cuerpecito del bebé fallecido permanece en el Servicio Médico Forense desde hace tres días.

La familia pagó 9 mil pesos en efectivo y 2 mil pesos por si había alguna complicación en el parto. A la fecha llevaban pagados casi 7 mil pesos.

La denuncia de los padres de familia quedó asentada en la Carpeta de Investigación 177-2017 y esperan que pronto puedan castigar a los dueños del hospital así como al personal que le negó la atención a su esposa.

También te puede interesar

Contenido protegido