La imagen es parte del abrumador escenario que hay en el país africano ante la crisis climática que afecta al mundo.
Una imagen muestra los desesperantes momentos que tuvo que pasar un grupo de jirafas que se desplomaron en el piso en medio de un panorama de sequía en el este de Kenia, un escenario que lamentablemente se ha vuelto constante y que afecta la vida animal y la seguridad alimentaria en el país africano.
El fotógrafo Ed Ram, de Getty Images, fue quien captó a seis jirafas muertas por la sequía en Centro Sabuli de Conservación de Vida Silvestre, en el condado de Wajir.
“Las jirafas, débiles por la falta de comida y agua causada por la sequía severa, murieron después de quedar atrapadas en el lodo mientras intentaban beber de un depósito cercano casi seco”, escribió el fotógrafo en su cuenta en Twitter.
Es precisamente la sequía uno de los efectos más cercanos que hay sobre la crisis climática, que en África está golpeando duro tanto a la alimentación humana, el ganado, la flora y fauna de las zonas.
El mismo centro de conservación comenzó a alertar en noviembre de este año una situación similar por la sequía, esa vez murieron 11 jirafas ante la escasez de agua.
“Nuestro sustento se está acabando lentamente a medida que las lluvias anticipadas fallan debido al cambio climático”, escribieron los encargados del lugar a través de su cuenta en Twitter, solicitando ayuda a los líderes mundiales en días del COP26, el cuestionado evento mundial que buscó alcanzar acuerdos sobre la crisis en el medio ambiente.
La sequía no solamente está afectando a Kenia, ya Madagascar también está viviendo los efectos de un panorama adverso, donde la hambruna generada por el calentamiento global es evidente, sin la presencia de cultivos y con una población que registra muertes por falta de alimentos.
A estas situaciones se suman también los incendios forestales en el planeta, el deshielo, la extensión de especies y, como contraparte, las inundaciones, entre ellas la de Tuvalu, donde incluso un ministro se grabó y envió el video a la COP26 para intentar generar alerta ante la crisis climática.