EL LATIGO CONTRA EMPRESARIOS
De buena fuente se sabe que no habría alguno de los reclamos de deuda por parte del grupo de empresarios que se apersonó en el palacio de Gobierno este lunes por la noche y que fueron desalojados, si no tuvieran el soporte respectivo pues de lo contrario no estarían pidiendo que se les cumpla.
Que son pasivos que vienen de la administración de Javier Duarte de Ochoa, en la mayoría de ellos, es correcto, puesto que es lo que el gobernador Miguel Angel Yunes Linares expone para hacerlos ver dudosos y quererlos estigmatizar como parte de la corrupción de aquel gobierno porque prestaron servicio en ese periodo. Pero de que su reclamo sea justo y sobre todo lícito, también seguramente que están en lo correcto.
De no serlo, estos empresarios no estarían metiéndose a la boca del lobo, o en todo caso, ya hubieran sido exhibidos con la información que, como aseguran, ellos mismos proporcionaron al gobierno estatal bajo el procedimiento que éste estableció. Subir toda su información, que incluye contratos y facturas, a una plataforma para comprobar la autenticidad de los mismos fue la condición y se cumplió.
Pero tras los hechos de ayer, los mismos hombres de negocios, acusan que este martes la Fiscalía General del Estado emitió un citatorio para pedir la comparecencia de uno de ellos, como un acto de venganza por haber tomado el palacio del Gobierno.
No obstante, la denuncia es por parte del secretario de Salud, Arturo Irán Suárez Villa, debido a las declaraciones que vertió vía twitter, Alejandro Cosío, empresario que reclama 223 millones de pesos como proveedor de medicamentos, y quien fue citado para el próximo jueves a las 18.30 horas en la Fiscalía especial de Investigaciones Ministeriales.
Según el citatorio es en base a la Carpeta de Investigación FGE/FIM/145/2018 abierta en su contra y para informarle de la existencia de la misma “radicada con motivo de la denuncia presentada por los conciudadanos, Arturo Irán Suárez Villa y Miguel Angel García Ramírez dentro de la cual tiene la calidad de investigado por la probabilidad de que cometió o participó en hecho que la ley señala como delito, darle acceso a los registros de ésta, hacerle de su conocimiento los derechos que le asisten, así como si es su deseo ser entrevistado en relación a los hechos que se investigan en la citada Carpeta de Investigación”.
El tema es que tras lo ocurrido ayer y que se viralizó en redes, a las que le apostó este régimen para comunicar la información oficial e incluso no oficial, además que fue noticia difundida en medios nacionales, algunos actores del sector empresarial alzaron la voz.
Por ejemplo, el ex presidente de la Canacintra, Carlos Abreu Domínguez criticó seriamente al gobierno estatal al afirmar que no hay voluntad para incentivar el crecimiento, además de que mostró decepción ante la falta de intención para resolver el tema de los adeudos.
Y no es el único, se le suma a la ola de reacciones el presidente de la CANACO Xalapa, Gerardo Libreros quien ha dicho que sus socios también reclaman más de 220 millones de pesos. Algunos ya se fueron a demanda pero otros esperan que les pague el gobierno del Estado.
En tanto, la CANACINTRA hizo similar reclamo. Y pide que Yunes Linares no le herede pasivos al gobierno que encabezará Cuitláhuac García sino que les resuelva por que desde el inicio de la administración están exigiendo su pago.
Y dice algo más que interesante el presidente de este organismo, Juan Manuel García, que ante la desesperación cada quien ha busco su método y sus guía respectivas, pero que al final lo que se “quiere es que nos pague”.
Lo cual es cierto puesto que mientras algunos hacen este tipo de manifestaciones y siendo que quedan 3 meses y medio de esta administración sienten que no va a liquidarles, otros más ya están buscando la intervención del próximo mandatario, lo que seguramente no caerá nada bien a Yunes.
Empresarios de la industria de la construcción reclaman que el actual régimen les adeuda 2 millones de pesos en supervisión y obras, que se suma a los rezagos de pasivos en el duartismo, y a través de los diputados electos de Morena están pidiendo al nuevo gobierno los atienda para que no quede su problema en el vacío.
Sin duda que si Yunes Linares quiere evitar seguir perdiendo puntos en su imagen, y si las aspiraciones políticas para la familia continúan, tendrá que conducirse contrariamente a como está sucediendo pues habrá de dejar un mal sabor de boca a los empresarios veracruzanos.