Orizaba, Ver.- Ante los problemas de falta de agua que se han generalizado, prácticamente en todo el país, pero principalmente en el municipio de Río Blanco y Orizaba, es necesario reflexionar sobre el cuidado de la casa común, exhortó el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enriquez Báez.
“Desde hace años distintos organismos y también científicos han advertidos sobre la tendencia en la escasez de este vital líquido y por eso es necesario reflexionar como el Papa Francisco nos invitó en su Encíclica Laudato Sí sobre el cuidado de la casa común, nuestra responsabilidad en el cuidado del medio ambiente, en el cuidado de los manantiales, ríos, mantos freáticos que a veces vemos no se ha regulado”.
Subrayó que por desgracia se han realizado construcciones en lugares que no deberían estar trayendo consigo la desaparición de arroyos, ríos y lagos de ahí que se debe tener presente que existe una responsabilidad compartida entre las autoridades y los ciudadanos.
“Ante esto creo que hay una responsabilidad compartida las autoridades correspondientes quienes deben de cuidar y proteger el medio ambiente, son de los temas que podrían también ayudar a regular para evitar la contaminación de los ríos para rescatar aquellos que están contaminados pero que sí se puede todavía hacer algo como nos lo manifiestan países que pues tienen un mayor desarrollo y que bueno pues nos dan ejemplo de que es posible conservar no solamente para contemplar la belleza sino también pensando en las generaciones futuras pues recurso el recurso del agua”.
Enríquez Báez mencionó que los ciudadanos juegan un papel importante en el cuidado del medio ambiente a través de la corresponsabilidad y con ello evitar seguir contaminando los mantos freáticos en el que es necesario que haya una disposición adecuada de los residuos domésticos, tales como el aceite como las baterías, la regulación de los talleres mecánicos y de algunos negocios que resultan contaminantes y que si no se regulan también contaminan echando aceite a las alcantarillas o a los drenajes sin una regulación”.
El sacerdote afirmó que si bien es un derecho humano el que se tenga una vivienda pero es indispensable que se vaya regulando el modo como se construyen pues también unidades habitacionales como los asentamientos humanos.
“Porque a lo mejor adquieren una casa en un lugar donde no se les da ni siquiera el abasto de este vital líquido no se le suministre con esto pues entran en crisis porque sabemos que es algo esencial para el desarrollo doméstico y humano el agua se utiliza sea para consumo sea para cuestiones de limpieza e higiene”.
Por último, el vocero Diocesano instó a la población hacer lo que les toca para cuidar el agua., “también esperamos que se les dé una justa respuesta a la demanda justa que hacen los habitantes para que se les provea del agua que necesitan”.
