**Argumentó que analizarían las propiedades de los espermatozoides con un microscopio
La noticia de una maestra pidiendo semen a sus estudiantes despertó indignación y críticas por parte de la ciudadanía boliviana, quienes acusaron a la docente de “pervertida” e “irreverente”, entre otras calificativos dentro de los comentarios del post publicado en TikTok.
Los hechos llegaron a los medios de comunicación locales, quienes optaron por entrevistar a la maestra a fin de recibir su versión de los hechos, así como su justificación por dicha solicitud escolar.
Con lágrimas en los ojos y un rostro derrotado, la maestra expresó sus disculpas por el medio televisivo.
“Mil disculpas a toda la población de Bolivia, y especialmente a mi pueblo de Minero, y amis alumnos, que creo que el papá o alguien lo ha tomado a mal lo que yo quería enseñar. Pero yo tengo niños pequeños, y no soy ninguna pervertida,, tengo niños chiquitos entonces le pido mil disculpas a todos los padres de familia, a mis estudiantes y a toda la población de la sociedad que comprende todo Bolivia, creo que somos seres humanos, y todos erramos”.
Argumentó sus hechos
Ante el cuestionamiento sobre lo que quería decirle a los padres y alumnos, contestó que lamentaba haberles faltado al respeto; no obstante, argumentó que todos han llegado a errar, por lo que, a través de sus disculpas, intentó “llegar al corazón” (de los afectados).
A su vez, detalló que la petición se encontraba dentro del plan de estudios del ministerio de educación, así como en la malla curricular, por lo que en todo momento aclaró que sus intenciones fueron de enseñanza.
Afirmó que ningún estudiante cedió ante la petición de proveer su líquido genital, puesto que “ninguno llegó”. Asimismo, precisó que no insistió al alumnado ante la petición, cuyo fin era analizar con un microscopio las características de un espermatozoide, además del tiempo que vive en un ambiente húmedo.
“Yo no soy ninguna madre pervertida, tengo mis niños pequeños, tengo uno de dos años, uno que está con cuatro y la otra tiene ocho años; el daño psicológico de mis niños a mí me duele, conmigo pueden hacer lo que les de la gana, pero mi niña de ocho años me dice, ‘mamá, te van a meter presa, ¿y quién me va a cuidar’; eso me duele señor reportero, pero como le dije, ido mil disculpas a toda la población de mineros, a toda Bolivia”
Información de El Heraldo de México