Orizaba- Ixtaczoquitlán

Por: Alex López

Ante el registro de las elevadas temperaturas propias de la temporada, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a través de su Delegación Veracruz Sur, recomienda a la población en general aplicar medidas para protegerse de los efectos solares, que pueden provocar deshidratación y golpe de calor.
Por su parte, el coordinador Auxiliar de los Servicios de Prevención y Promoción para la Salud en Trabajadores IMSS, Humberto Enríquez Torres, explica que el golpe de calor es una situación médica en la cual el organismo está expuesto a extremas temperaturas de calor, que origina la pérdida excesiva de líquidos a través de la sudoración.
Se manifiesta con taquicardia, cefalea, vómito, elevación de la temperatura corporal, deshidratación, pérdida de la conciencia y en casos muy extremos la pérdida de la vida, de ahí la importancia de la prevención y en caso de presentarse el cuadro, inmediatamente solicitar la intervención de los servicios de emergencia, indicó el especialista.
Destacó que la intervención del personal de salud ante la presencia de un golpe de calor es indispensable, ya que se requiere manejo hospitalario porque los pacientes requieren reposición de los líquidos perdidos, que generalmente son por la vía parental, es decir mediante suero para recuperar los electrolitos que tiene el organismo, además de estar checando con frecuencia sus signos vitales.
Los más expuestos al golpe de calor, son niños y adultos mayores por lo que insistió en la importancia de la prevención, principalmente evitar la exposición innecesaria a los rayos solares en las horas de mayor intensidad, por ello la petición de que actividades recreativas y deportivas se realicen antes de las 12 del día o después de las cuatro de la tarde.
Otra de las recomendaciones para la prevención, es utilizar ropa clara, de preferencia de algodón y de manga larga, usar gorras, sombreros o sombrillas, utilizar bloqueadores solares. La hidratación constituye otro punto importante en evitar afectaciones por el calor, de manera que es conveniente tomar suficientes líquidos, preferentemente agua simple o de frutas sin azúcar, “no se recomienda consumir refrescos por la elevada cantidad de azúcar que contiene y en lugar de ayudar, puede afectar al organismo”.
Mencionó que la deficiencia de electrolitos derivado de la deshidratación, puede afectar el funcionamiento de riñones, corazón, pulmón, sistema respiratorio, pulmonar e incluso a nivel cerebral e insiste en la aplicación de las medidas de prevención.

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